El Gobierno de los Estados Unidos busca la aprobación de fondos para combatir las causas de la migración irregular en países como Guatemala, Honduras y El Salvador. El monto asciende a US$4 billones de dólares, los cuales no serán entregados a los gobiernos de dichas naciones.
Lo anterior fue informado esta mañana por Roberta Jacobson, Coordinadora de la Frontera Sur del Gobierno de los Estados Unidos, durante una conferencia de prensa desde La Casa Blanca, en Washington, D.C.
La funcionaria aclaró que no buscan restar importancia a las autoridades gubernamentales, pero que trabajarán directamente con la sociedad civil y con organizaciones no gubernamentales que gozan de respeto dentro de las comunidades de donde provienen los inmigrantes.
Jacobson enfatizó que, por su parte, los Gobiernos de Guatemala, Honduras y El Salvador deberán comprometerse elementos que causan la expulsión de sus connacionales, como la corrupción y la violencia.
Reconoció además que los Estados Unidos no puede realizar esos cambios en los países que componen el denominado «Triángulo Norte», pero agregó que existen bastantes organizaciones que buscan realizarlos.
Anunció que se ha retomado el programa para reunir a menores que están fuera de los Estados Unidos con sus padres que gozan de un estatus regular en esta país.
También resaltó que las fronteras de los Estados Unidos continúan cerradas, contrario al mensaje que traficantes de personas, conocidos como «coyotes», esparcen en estas naciones.