El Vicepresidente de los Estados Unidos de América, Joe Biden, enfatizó ayer la contribución a la economía estadounidense por parte de la comunidad inmigrante y aseguró que la reforma migratoria contribuirá a reducir el déficit fiscal, durante un discurso que brindó ante la Cámara Hispana-Estadounidense de Comercio.

«Estas personas solamente están esperando; esperando por una oportunidad de poder contribuir completamente. Y por eso, desde mi punto de vista, 11 millones de indocumentados ya son estadounidenses desde mi punto de vista. Ellos solo quieren una vida decente para sus hijos y una oportunidad para contribuir a la sociedad, una oportunidad para fundar sus raíces y ayudar a construir la próxima gran América. Yo realmente creo eso. Para ello es por lo que están peleando», declaró.

Biden señaló que la cosa más importane que se puede hacer para mejorar la economía estadounidense es aprobar la reforma migratoria inmediatamente. Instó al líder de la mayoría en el Congreso, el republicano John Boehner a que permita una votación en la ley sobre la reforma migratoria.

El pasado miércoles 27 de marzo, la minoría demócrata ante la Casa de Representantes introdujo una acción, conocida como «petición de descarga», para forzar una votación del tema en esa institución. La líder de esa agrupación, Nancy Pelosi, conjuntamente con Xavier Becerra, demócrata por California, apuntaron que la reforma debe ser aprobada por el Congreso este año para combinarla con la reforma del Senado estadounidense, lo que convierte el tema en un asunto urgente, mucho más que ganar las elecciones del próximo noviembre para su partido, enfatizó Pelosi.

La congresista destacó su anuencia para trabajar con los republicanos, pero con la condición de que no aceptará ninguna ley que deje afuera cualquier posibilidad para los indocumentados de alcanzar la ciudadanía. «Quiero esta ley desesperadamente, estoy dispuesta a hacer cualquier compromiso posible, pero no podemos comprometer que no exista una camino a la ciudadanía», dijo.